Tenemos la suerte, buena o mala, de que cada vez que toca trabajo de kihon estamos pocos. Para bien porque se corrigen más errores y se hacen más repeticiones; para mal porque la gente que no viene luego anda más perdida. Hoy ha sido por tanto uno de los días que menos gente hemos acudido al keiko pero, eso sí, le hemos sacado partido. Hemos comenzado, tras el calentamiento habitual (cada vez empleamos menos músculo en Tai no Henka, ¡bien!), con las dos series de Tai Sabaki, los desplazamientos básicos: hiraki, irimi, irimi senkai y nagashi, por el exterior y por el interior. Más de un problema en los detalles de cómo desplazar nuestro centro, pero nada que el tiempo no cure. Aprovechando la poca concurrencia hemos tenido tiempo de correr. Hemos trabajado las series de Atemi Waza por el interior y por el exterior, las series de Kansetsu Waza interior y exterior y, para terminar, las series de Nage Waza por dentro y por fuera. Muchos detalles y curiosidad por el origen de algunas técnicas y cómo se diferencian éstas de las de otras ramas, líneas o escuelas. De especial interés ha sido Yama Arashi por su origen, contundencia y engañosa facilidad y por ser un nexo entre las técnicas de atemi, de luxación, de proyección y de estrangulación. Asimismo la progresión Kote Gatame, Ude Gatame, (Shita) Ude Garami ha despertado interés y curiosidad por la relación existente entre ellas. En cuanto a las técnicas de proyección las más "delicadas" han sido Ippon Seoi Nage y O Goshi por ser las menos conocidas entre los Aikidokas y por las diferencias de ejecución con sus homónimas en Judo. Por supuesto se han quedado varias series en el tintero: estrangulaciones, controles de brazo y de pierna y, por supuesto, el Kihon Kata Ichiban. Pero ya no paramos ante nadie y estas series encontrarán su tiempo en unas semanas. Seguimos dando guerra. Ad avane!
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Para romper la racha de nuevas incorporaciones hoy hemos estado en cuadro. No obstante hay que tirar millas y hemos seguido el programa previsto siguiendo con la técnica base de Te Hodoki. Breve calentamiento y repaso somero de las cuatro primeras técnicas de Kansetsu Waza que vimos la semana pasada. Ninguna sorpresa al comprobar que los asistentes se traían la lección bien aprendida. ¡Bravo! Tras el rápido repaso hemos visto las cuatro técnicas siguientes de la serie sin mayores complicaciones: Kote Kudaki, Yubi Kudaki, Ude Juji Gatame y Tembin Gatame. Quizá con la que más hemos luchado haya sido con la segunda de ellas ya que es difícil cogerle el punto a la posición correcta de las manos. Esto se soluciona con repeticiones y más repeticiones, ¡ningún problema! Aprovechando que los asistentes de hoy han sido los más asiduos nos hemos atrevido con la serie de Nage Waza (técnicas de proyección) y la verdad es que se ha dado mejor de lo que esperaba. El progreso es rápido aunque no hay que dormirse en los laureles y tenemos que seguir repitiendo y repitiendo todo el trabajo de base de manera constante debido a su importancia para el progreso en el arte. Gracias a los pocos irreductibles que venís semana tras semana a andar juntos el camino. La semana que viene en nuevo emplazamiento, más céntrico y cómodo para todos. 頑張ってくれー!
Keiko triste en asistencia pero lleno de contenido. Tras comenzar como habitualmente con Tai no Henka, Morote Dori Kokyu Ho y Ryote Dori Kokyu Ho hemos repasado las series de kihon de atemi, luxación y proyección tanto por el interior como por el exterior; en total 24 técnicas de base de las que progresar a otra miriada de ellas. Quedan muchos aspectos por mejorar: kamae, shisei, taisabaki... aspectos básicos que hacen que una técnica funcione. Debemos trabajar mucho el kihon y dejar las variaciones para más adelante. Como decía Saito Sensei, kihon, kihon y más kihon hasta el tercer dan, y después kihon, kihon y más kihon. Sin un kihon correcto no hay nada, no hay ki no nagare que valga ni variaciones posibles. Esto es lo que hay que repasar una y otra vez hasta que salga solo. Hay que poner especial cuidado en la postura tanto física como mental. Kamae y Shisei. Hay que realizar un taisabaki efectivo, económico y eficaz; y sólo entonces realizar una técnica, la apropiada en ese momento, paso a paso y marcando los puntos fundamentales de la misma: correcta posición de los pies, de las caderas, de las manos; agarre correcto, ángulo adecuado, el desplazamiento estudiado y entonces ¡bum! ahí está la técnica. Sale sola. La semana que viene más kihon. Y así haremos hasta que salga solo, hasta que los movimientos sean los instintivos, hasta que el cuerpo no pida otra cosa. Ya habrá tiempo para otros desarrollos. Pero para eso hay que venir. ¡Olé por los incondicionales! Ellos tienen todo el mérito. Sólo ellos siguen caminando... ¡Osu!
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